Las parejas que no logran concebir, pueden buscar un embarazo gracias a la reproducción asistida.
Muchas parejas que desean convertirse en padres tienen que afrontar el desafío, por distintos motivos, de no poder hacerlo de forma natural.
Aunque muchos pacientes se desaniman ante los diversos intentos y sus posteriores fracasos, lo cierto es que gracias a la medicina reproductiva, pueden convertirse en padres.
Con diversas herramientas tecnológicas que permiten por ejemplo la donación de semen, el proyecto de familia hoy es posible.
“Lo más básico es asignar donantes por características físicas y grupo sanguíneo, es decir, por fenotipos. Se buscan similitudes de color de ojos, pelo, piel, etc.”, explica Santiago Giordana, director del laboratorio FIV de WeFIV.
Es importante descatar que en Argentina la donación de gametos es anónima.
A la hora de concebir, los signos a los que hay que estar alerta
Si bien cada caso es particular y es necesario evaluar la historia clínica de cada paciente, existen signos de alerta que podrían estar vinculados a la infertilidad masculina.
Por ejemplo, las dificultades para eyacular, el bajo volumen de líquido eyaculado, la disminución del deseo sexual y la dificultad para mantener la erección (disfunción eréctil) pueden significar algún problema para concebir.
Por eso mismo, la donación de semen es una alternativa para quienes tienen alteraciones cromosómicas en los espermatozoides, azoospermia que es la ausencia de espermatozoides en el eyaculado o portan enfermedades hereditarias.
Cómo se hace la donación de semen
Pueden donar semen los hombres que tengan entre 18 y 40 años. Además, deben estar en buenas condiciones de salud, no deben tener antecedentes de enfermedades genéticas hereditarias, y deben disponer de plena capacidad para tomar decisiones.
Para iniciar el procedimiento, los especialistas suelen pedir una serie de estudios para definir si la persona cumple con los requerimientos.
Luego se lleva a cabo evaluación psicológica y también se hacen pruebas médicas para analizar -mediante estudios de sangre, semen y orina- enfermedades genéticas e infecciones transmisibles.
Para encarar un tratamiento de reproducción asistida, existen múltiples opciones y es necesario contar con el apoyo médico. Se puede lograr de forma sana y con los cuidado necesarios.