Las olas de calor no solo pueden producir deshidratación e insolación, también afectan la salud reproductiva masculina.
Seguramente ya hayas escuchado muchas veces sobre las consecuencias negativas que trae el cambio climático, como el aumento de las temperaturas globales que está derritiendo los glaciares y elevando el nivel del mar.
Quizás incluso experimentaste otra de sus características, los eventos meteorológicos extremos, como las olas de calor y sequías, los huracanes y las inundaciones, que han devastado a ciudades enteras y llevado a muchas personas a tener que emigrar.
Pero ahora algunos científicos están alertando sobre otra consecuencia mucho menos obvia de estos fenómenos: su impacto negativo sobre la reproducción humana. Más concretamente, sobre la fertilidad masculina.
Un estudio realizado por la Universidad Nacional de Singapur en abril, que analizó el semen de 818 hombres, determinó que el calor extremo casi duplicó -aumentó en un 46%- las chances de tener un recuento bajo de espermatozoides, lo que dificulta la procreación.
Fuente: Verónica Smink para BBC News Mundo, Argentina.